miércoles, 22 de septiembre de 2010

Para reflexionar: "Somos artistas porque llevamos dentro el espíritu del primer ARTISTA"


¿Qué se necesitará para alcanzar esta generación?


Tienes mensajes, sabes qué es la verdad, pero si acaso tienes problemas con el lenguaje, usa traductores, allí están tus jóvenes.

Vincent van Gogh trabajó durante tres años como pastor en una iglesia de las comunidades mineras. Pero el ardor religioso de la comunidad no soportó la personalidad de un artista. La pasión que Van Gogh tenía por expresarse chocaba con la "vocación" de ser evangelista y pastor.
¿Por qué tenía que usar Vincent van Gogh la oratoria como medio para comunicar la fe? ¿Por qué no podía usar la pintura?
La iglesia protestante del siglo diecinueve perdió a un gran comunicador, a un artista pintor. El mundo ganó a un gran postimpresionista.

No es fácil entender la mente del creativo. Por naturaleza, ellos y ellas no piensan como el resto de la gente porque miran el mundo diferente. En el cuerpo de Cristo yo me atrevería a decir que son como los ojos. Permiten que entre al cuerpo una luz que tal vez no sabíamos que estaba allí, porque el artista tiene la habilidad dada por Dios de ver más de la realidad, más del gran panorama de Dios creó.

Estamos viviendo en una era visual. Dependemos cada vez más de la comunicación de información mediante medios visuales que a través de la palabra escrita y hablada. Esta generación está a la deriva en un mar de imágenes que expresan múltiples cosmovisiones, dificultándose la identificación de una verdad absoluta. Si los cristianos tomáramos en serio la batalla cultural, nos involucraríamos en las artes y en la cultura.

Muchos de nuestros héroes bíblicos tenían un área artística en su vida. Moisés era escritor. David, músico y poeta. Salomón, escritor y arquitecto. Pablo, que citaba a los poetas griegos, también usaba formas literarias estoicas para transmitir las doctrinas básicas del cristianismo. La Biblia describe toda forma de arte, desde la música, el drama y el teatro hasta la literatura, la pintura y la escultura, y las describe como formas de expresión que le daban la gloria a Dios.

Aristóteles dijo: "El arte toma a la naturaleza como modelo", y qué es la naturaleza sino una de las obras maestras de Dios. Martín Lutero dijo que un zapatero alaba a Dios cuando hace un buen par de zapatos porque está cumpliendo con el talento que Dios le dio. No es diferente con otras expresiones de arte.

Los creativos que este mundo necesita son jóvenes cristianos llenos del Espíritu del Creador. Intrépidos, atrevidos, emprendedores, obedientes a la voluntad de Dios pero indómitos a lo establecido. La creatividad puede florecer en un ambiente santo y cristiano, es algo que resulta en la originalidad y diversidad, como el carácter de Dios...

¿Qué hay en el corazón del hombre que lo lleva a crear, a expresarse en forma artística?

Aquel que primero soñó, diseñó, modelo, trazó, dibujó, pintó, esculpió, edificó, bailó y cantó. Esta Persona que tiene el corazón más original que existe creó de la nada elementos de expresión: color, forma, textura, sonido, fuerza y vida misma. Después, de esos mismos elementos que fabricó del vacío, creó un compuesto y le sopló vida, y fue parte de Él. Desde entonces esta obra de arte, el hombre, ha tenido el impulso de crear tal como lo hizo el Artista principal...

Del Libro "La Generación Emergente"

jueves, 17 de junio de 2010

Nueva patria...


Si encuentro en mí un deseo que nada este mundo puede satisfacer, la explicación más probable es que fui hecho para otro mundo. Si ninguno de mis placeres terrenales lo satisface, eso no prueba que el universo sea un fraude. Probablemente los placeres terrenales jamás estuvieron destinados a satisfacerlo, sino a estimularlo, a sugerir lo real… Debo mantener vivo en mí el deseo por mi verdadera patria, que no encontraré sino hasta después de la muerte.
C.S. Lewis

viernes, 11 de junio de 2010

Un Mundo...


Las escenas que menos nos gustan pueden ser las más importantes para la historia que se está contando...
En mi presente, aparecen un sin fin de temas y descubro lugares difíciles de entender. Sé que he logrado con la ayuda de Dios, superar fracasos, tristezas y desilusiones. Pero me di cuenta que al tomar una importante decisión, de algún modo me topo con emociones ya olvidadas...
Hace poco volví a experimentar la desdicha, un dejo de frustración y mire mis sueños rotos. Fue como ponerme de pie frente a un largo camino, mientras que con mi corazón volvía la mirada y observo lo que ya no es parte de mi y con toda seguridad, experimenté que nunca más volvería a vivir. Es extraño, aquello tan esperado, anhelado y soñado ya no esté. Y ciertamente, sentí un vacío que se necesita llenar. Un espacio que quedó en blanco y necesita ser pintado de nuevos colores.

De pronto surge la agradable y real compañía de Quién ha sido la persona más real en mi vida. Se coloca junto a mí en el camino, toma mi mano y con una agradable sonrisa me dice: ¡Vamos! no hay que temer. Y mientras avanzamos me ayuda a entender que parte de esos vacíos, provienen o se mantienen desde mi niñez. Reconozco que no logro viajar hacia ese pasado y un frío hielo me hace experimentar dolor. Que hoy por hoy entiendo que es necesario para crecer y por sobre todo encontrar el Consuelo tan anhelado.

Y lo que hoy necesito plasmar en estas líneas, es que hay una realidad que proviene de otro mundo, y segura estoy que tiene que ver con esa Eternidad que anhelamos. Durante este proceso, Jesús de manera amorosa trae a mi memoria un recuerdo y junto a Él observo situaciones cotidianas durante las noches de mis 8 a 10 años. Sentada en el living de mi casa con mis hermanos y mamá, esperamos la llegada de papá. Y cada vez que el reloj marcaba las 00:00, mi mamá se ponía muy nerviosa y hacía que esas noches se volvieran más largas que de costumbre. Y al rato de habernos dormido, observo como saltamos de susto al saber que mi papá llega haciendo desorden y bulla... lo que provoca enojo y discusiones. Debemos arroparnos rápidamente y salir casi a escondidas de la casa.
Y así, asustados y como escapando de él, comenzamos a caminar una larga senda y a oscuras. Y es ahí dónde me veo caminando en medio de la calle, alejada de mi mamá y mirando el suelo con temor de levantar la cabeza y encontrarme con algo no agradable al frente y detrás de mi. Y Dios tan hermosamente toca mi hombro y me dice; Quiero que levantes tu cabeza y mires hacía atrás. Lo hago y a pesar de la pesada noche, logro ver que mis pisadas están siendo regadas de un color rojo carmesí. Tan nítida es la imagen que comprendí que Dios siempre estuvo conmigo en esas situaciones. Pero lo mejor, es que me enseña que Él ya se llevo el miedo e incertidumbre. Él está borrando el dolor.

Dios te muestra el mundo actual, el pasado y el por venir... Todo moviéndose hacia un fin que de alguna manera pone en los corazones y que hace que sueñes despierta y anheles alcanzar y aunque se desarmen, rompan o roben. Él los devuelve, porque su propósito es que no olvides que existe un lugar especial, dónde está nuestra morada y dónde volverás a vivir las situaciones desde otra mirada. Encontrando aquello perdido, olvidado o jamás experimentado: AMOR.

Sabes? hay veces que al cerrar los ojos, mi corazón anhela viajar a un mundo especial, a un paisaje lleno de árboles, flores y ricos aromas con un cielo maravilloso y con un cálido sol que rose mi rostro. Ciertamente es en anhelo de mi alma, el cumplimiento de que Él "ha puesto eternidad en el corazón".
Y estando en esos pensamientos, ciertamente se despierta el querer estar en ese lugar. Y lo que me hace muy feliz, es que ya tengo la promesa de que así será. Mientras tanto espero...

jueves, 10 de diciembre de 2009

Mi Alabastro...


“Reír es correr el riesgo de parecer tonto.

Llorar es correr el riesgo de parecer sentimental.

Acercarse a otro es correr el riesgo de involucrarse.

Demostrar sus sentimientos es correr el riesgo de demostrar su verdadero yo.

Poner sus ideas, sus sueños, delante de la gente es correr el riesgo de perderlos.

Amar es correr el riesgo de no ser amado.

Vivir es correr el riesgo de morir.

Esperar es correr el riesgo de desesperar.

Tratar, es correr el riesgo de fracasar”.


Meditaba en este texto hoy y me detuve en lo siguiente: Poner sus ideas, sus sueños, delante de la gente es correr el riesgo de perderlos.

Y me pregunte, ¿será por eso que suelo callar antes de compartir lo que anhela mi corazón?. Y fue una idea que creí por mucho tiempo. Hasta que hable y comuniqué mis sueños. Y bueno ciertamente al comenzar a hacerlo, poco a poco se fueron diluyendo.

Hoy en día ya no está lo que anhele tan fervientemente para mi vida. Aquello que comenzó de niña y fui abrazando a medida que crecía. Ha sido increíble como he ido aceptando y me he amoldando a algo que va más allá de mi imaginación y más allá de lo que alguna vez creí esperar.

Si hago memoria sobre este tema en particular, me doy cuenta que en estos últimos años, muchas veces declare “no vivo yo…”, “quiero hacer Tu voluntad”, “dame a conocer Tus sueños”. Y a medida que mi corazón comenzaba anhelar esto más que cualquier otra cosa, comenzó una obra misteriosa para mi, pero agradable para mi alma.

He tenido que ir aceptando cosas que no han sido agradables. Y más de alguna vez quise acabar toda esta idea tan nueva. Comencé a experimentar dolor, aquel dolor que no se puede describir. Son un sinfín de emociones que se vuelven lágrimas, y de aquellas que se pierden en el quehacer del servicio. Y recuerdo que una vez recibí uno de esos mensajes tan claros y reconfortador para mi corazón, queriendo decir que mis lágrimas están siendo guardadas en un lugar especial.

Hace muy poco, quise abrir más mi corazón, intentando hacer las cosas bien. Pero no esperé que detrás de esto, nuevamente pasara por una prueba mayor. De aquellas que te deja perplejo y sin ninguna emoción. Recuerdo que caminaba y veía tan larga la calle con sus árboles, como sin fin… anhelando llegar a mi destino, lo esperaba por mucho tiempo, pero a la vez quería desaparecer. Necesitaba llorar, pero debía continuar con la función del día. Fue muy duro y muy doloroso.

Hoy lo que logro ver, es que nuevamente fue roto mi alabastro en las Manos de Aquel que puede hacer todo de nuevo. Mi corazón estaba hecho trizas, y un dolor muy agudo existía en él. Sólo sé que me dijo a través de una persona: “Me perteneces”. Y pertenecer incluye tantas cosas inimaginables aún para mí.

“Me perteneces” escuché, y me quiso decir que debo corresponder, dejarme alcanzar, afectar, importar, corresponder y por sobre todo, dejarme tocar. Sólo colocó Su dedo sobre mí, y fui quebrantada por completo.

Ahora me encuentro nuevamente en el camino, continúo hacía la meta, aquella que anhela mi corazón y espera. Sequé mis ojos, y dejé nuevamente que encontrará la mirada de Aquel que conforta mi alma. Y aquí estoy, en las Manos del que hará de mí, la obra que sólo en su corazón continúa soñando. Y sé terminará para Su Gloria.


El Señor nunca permite el sufrimiento a menos que tenga un propósito hermoso. Y él da las fuerzas para soportar.


“Porque con la tristeza del rostro se enmendará el corazón”. Eclesiastés 7:3b


"El crisol para la plata, y la hornaza para el oro; Pero Jehová prueba los corazones" Probervios 17:3



miércoles, 11 de noviembre de 2009

Los sueños que sueño para ti...

Tú saboreas las lágrimas.
Tú estás perdida en el lamento.
Tú ves tu pasado;
Yo veo el mañana.
Tú ves la oscuridad;
Yo veo la luz.
Tú conoces tus fracasos,
pero Yo conozco tu corazón.
Los sueños que sueño para ti
son más profundos que aquellos a los que te aferras.
Más preciosos que la cosa más fina que conozcas;
y más reales que los tesoros que persigues.
Deja morir los viejos sueños
como estrellas que se opacan de nuestra vista.
Entonces, toma la copa que te ofrezco;
y toma profundamente de ella
los sueños que Yo sueño para ti.
Tú ves tu vergüenza;
pero Yo veo tu gloria.
Tú has leído una página;
Yo sé la historia.
Yo sostengo la visión
en que te convertirás.
Mientras creces en la verdad;
mientras aprendes a andar en amor.
Deja morir los sueños viejos
como estrellas que se opacan de nuestra vista.
Entonces toma la copa que te ofrezco;
y toma profundamente de ella
los sueños que sueño para ti.

lunes, 20 de julio de 2009

Este es el camino...


Pedí al Señor que me permitiera crecer en fe, amor y en toda gracia;
poder conocer más de su salvación y buscar con más ansia Su Rostro.

Fue Él quién me enseño a orar así y confío que Él ha respondido la oración;
pero ha sido de una manera tal que he estado a punto de caer en la angustia.

Pensé que en alguna hora favorable, Él contestaría de inmediato mi oración,
y por el poder transformador de su amor, subyugaría mis pecados y me daría reposo.

En lugar de ello me hizo sentir los males ocultos de mi corazón.
Y causó que los poderes feroces del infierno asaltaran mi alma;
hasta con su propia mano pareció tener la intención de agravar mi aflicción.

Frustró todos los designios propicios que tramé,
doblegó mi cordura y abatió mi orgullo.
Señor ¿Por qué esto?, clame tembloroso.

"Este es el camino", respondió el Señor. "Yo contesto la oración para recibir gracia y fe. Estas pruebas en tu interior Yo empleo para hacerte libre del pecado y del viejo hombre; además frustro tus designios de gozo terrenal para que puedas hallar
tu TODO en Mi"


Extracto de John Newton